¿Cómo decoro la oficina de mi casa?
Debido al confinamiento muchas personas (tanto en relación de dependencia como autónomos) decidieron armar una oficina personal dentro de su casa; ahora bien ¿Cuál es la mejor manera de decorarla para exprimir al máximo la experiencia del día a día? Seguí leyendo para averiguarlo…
1) La Elección del Color
Este primer aspecto va a depender del tamaño del ambiente con el que contemos: Si es pequeño, lo más inteligente va a ser ir por colores claros en las paredes (blanco, gris claro, crema) para mantener el ambiente lo más grande posible visualmente.
Caso contrario, si disponemos de una superficie superior, podemos darnos el placer de optar por pintar una pared o todas de un color más oscuro o intenso.
El color del mobiliario podemos elegirlo estratégicamente, ya sea eligiéndolo de un color similar al del resto del ambiente, generando así una paleta de colores monocromática (ej: paredes blancas, muebles color claro) o también optar por un color opuesto de mobiliario para formar un «efecto contraste». Esto último va a depender de los gustos de cada persona, ambas decisiones son correctas visualmente.
2) Complementos
A veces no es lo primero que se nos viene a la mente, pero los muebles y herramientas complementarios deben formar parte de la planeación general de nuestra oficina personal.
Incluir mobiliario complementarios como cajoneras, bibliotecas y archivos, puede ser considerado algo que ocupa cierto espacio del ambiente, pero si lo que buscás es optimizar tu capacidad de trabajo al máximo, un espacio ordenado puede ser sumamente valuable para lograr tus objetivos.
También podemos agregar ciertos elementos de “relax” como un pequeño sillón o una cafetera que nos permita darnos pequeños descansos a una distancia cómoda de nuestro escritorio.
3) Iluminación
Este factor puede ser analizado en dos partes. La primera es saber administrar la luz natural, por lo que vamos a tener que hacer entrar en juego a toda la distribución de nuestro hogar.
¿A qué vamos con esto? Siempre va a convenir establecer nuestra oficina en el ambiente más luminoso que tengamos, ya que ahí vamos a pasar la mayor parte de nuestro día y contar con una buena iluminación va a ser un factor determinante en nuestro nivel de energía y resistencia a lo largo del día. Dejemos los dormitorios únicamente para descansar.
En segundo lugar, debemos invertir en una buena iluminación con un tono que nos resulte cómodo y nos mantenga concentrados, sin provocarnos sueño o malestar con el correr de las horas. Dicha luz, debe estar bien dirigida a nuestro espacio de trabajo, de manera tal que no nos pegue directamente en la cara y no genere un exceso de sombras.
Podemos complementar todo con una pequeña luz de descanso para nuestro sector de «lounge» dentro de la oficina.
4) El Mobiliario
Por último debemos elegir el mobiliario principal de la oficina: Nuestro escritorio individual o múltiple si trabajamos con alguien más en la casa.
Se recomienda tener en cuenta el espacio disponible a la hora de elegir el modelo del mismo, por ejemplo: si contamos con un espacio reducido, va a convenir seleccionar un escritorio con patas rectas que no ocupen espacio más allá de la superficie de trabajo; ahorrandote espacio y máximizando tu área de trabajo.
Si ese no es el caso, podemos darnos el placer de colocar mobiliario con patas oblicuas, extensiones y todo lo que creamos necesario para nuestra comodidad. Lo importante es que nuestro ambiente nos resulte funcional y esté en sincronía con nuestro gusto decorativo.